Las estafas y engaños son algo común en el ecosistema cripto. Las autoridades estadounidenses lo saben, y en una operación al más puro estilo del cine negro pero en versión moderna, el FBI ha acusado a 18 personas por llevar a cabo operaciones fraudulentas con criptomonedas.
La organización norteamericana lanzó al mercado (en incógnito) una criptomoneda, llamada NexFundAI y basada en la red de Ethereum, para dejar que alguna de las empresas que se dedican a realizar este tipo de fraudes la usaran para estos fines, y efectivamente, han caído varias. Principalmente, las compañías cripto que han sido acusadas utilizaban tácticas conocidas como «wash trade» y «pump and dump».
Tal y como explican desde la Oficina del Fiscal de Massachusetts, se trata de los «primeros cargos penales contra empresas de servicios financieros por manipulación del mercado y ‘operaciones de lavado’ en la industria de las criptomonedas».
En nota de prensa, explican que se han incautado más de 25 millones de dólares en criptomonedas, y se han desactivado varios bots comerciales responsables de operaciones de lavado por valor de millones de dólares para aproximadamente 60 criptomonedas diferentes
Por otro lado, el pump and dump es una táctica también muy conocida por la que la empresa o creador de una criptomoneda vierte todo tipo de mensajes falsos, o trata de generar el máximo hype alrededor de una criptomoneda solo con el objetivo de vender su parte cuando esta alcance un gran valor, dejando que los otros inversores pierdan sus fondos cuando el entusiasmo cese.
Es una estrategia usada en muchos casos similares dentro de la esfera cripto, por la que las personas invierten dinero en un activo digital pensando que aumentará de valor cuando en realidad no hay ningún motivo para que lo haga, más allá de la pura especulación.
En concreto, estas son las empresas o actores implicados en las tramas fraudulentas:
- Gotbit
- ZM Quant
- CLS
- MyTrade MM
- Saitama
- Robo Inu
- VZZN
- Lillian Finance
Una lección para los inversores en cripto
Toda esta situación deja algunas lecciones para los inversores o usuarios del espacio cripto. La principal (aunque ya debería estar más que asumida por cualquiera que participe en este sector) es que hay que informarse sobre qué hay realmente detrás de un proyecto cripto antes de decidirse a invertir en él.
Además, queda en relieve el hecho de que el volumen de trading no es siempre un buen indicativo para conocer la salud o potencial de una criptomoneda, ya que puede ser fácilmente manipulable con bots o actores humanos.
«El mensaje de hoy es que, si hace declaraciones falsas para engañar a los inversores, eso es fraude. Punto. Nuestra Oficina perseguirá agresivamente el fraude, incluso en la industria de las criptomonedas«, ha declarado el fiscal federal interino Joshua Levy.
Aunque algunos usuarios se han sorprendido por esta intromisión del FBI en un sector aparentemente muy desregulado, la noticia no hace más que mostrar que, para las autoridades competentes, los fraudes en el ecosistema cripto son tan punibles como los que involucran dinero fiat. Los crímenes financieros son algo muy serio, también en el sector cripto.